La salvia blanca ha sido considerada sagrada por los nativos americanos durante miles de años y se ha utilizado para ahuyentar la mala energía, limpiar y purificar personas y lugares a través de la técnica de difuminado. La lavanda, bien conocida por sus cualidades médicas, así como por sus poderes de protección y limpieza, simboliza la pureza y la limpieza.
También abre el chakra del corazón y atrae la energía amorosa.
La salvia blanca terrosa fresca y la lavanda herbácea dulce se combinan en estas varitas para una experiencia altamente aromática, creando una atmósfera pacífica y armoniosa y permitiendo una mayor facilidad de relajación.